jueves, 24 de enero de 2013

Running Wild – “Pile Of Skulls”



¡Hola de nuevo!  Seguimos viajando por el tiempo y el espacio en este universo del metal, y bueno, nos hemos acordado de grandes estilos, grandes discos que han trazado y continuado el camino de este gran y poderoso estilo de música. Hoy le toca a la reformada banda Running Wild, unos clásicos del Heavy Metal mundial. Muchos habrán pensado que el Capitán Rolf Kasparek “Rock ‘n Rolf” ha encallado su barco y haya puesto el ancla definitivo a su travesía por los siete mares del Heavy Metal… Pues, ¡¡A CAMINAR POR LA TABLA, PIRATAS DE AGUA DULCE, HAHAHAHAHA!! Esta flotilla de bucaneros vuelve a estremecer los siete mares con un nuevo disco, que destila Heavy por todas sus canciones, bajo el nombre de “Shadowmaker”. Pero vamos a entrar en su bóveda secreta, y revisar un libro de bitácoras escrito hace veinte años atrás, titulado “Pile Of Skulls”.



Running Wild es un grupo de heavy metal formado en 1976 en Hamburgo, Alemania, por Rolf Kasparek junto a Uwe Bendig, Michael Hoffmann y Jörg Schwarz bajo el nombre de “Granite Hearts”. No es hasta 1977 cuando se incorpora Wolfgang Hagemann a la batería y Matthias Kaufmann al bajo cuando se consolidan con el nombre de Running Wild, debido a su afición a Kiss y Judas Priest. Running Wild, liderado por Rock'n'Rolf (pseudónimo de Rolf Kasparek), al ser el único componente que ha permanecido desde sus inicios en el grupo y principal compositor, es considerado uno de los grupos fundadores del estilo europeo de Speed/Power metal de los ochenta.

Desde sus inicios, y durante sus dos primeros álbumes (“Gates to Purgatory”(1984) y “Branded And Exiled” (1985)) serian tachados, al igual que muchos grupos de Heavy metal, de satánicos debido a la temática de brujería y espiritismo de sus letras. Durante este tiempo hay varios cambios de alineación; también empezaron a crecer en popularidad y el número de fans aumentó bastante.

En 1987 sale el que es considerado su álbum insignia, “Under Jolly Roger”, que tuvo un gran éxito. Esto conlleva un cambio importante en la imagen del grupo, ya que abandonan los temas satánicos y se centran en el tema histórico, sobre todo en el de la piratería y batallas navales. Por ello son considerados los creadores del “Metal Pirata”. Su estilo musical en cambio se conserva, con el predominio de las guitarras y una potente batería.

En sus posteriores álbumes se refina e intensifica el tema de la piratería: "Port Royal" (1988), "Death Or Glory" (1989), "Blazon Stone" (1991) y "Pile Of Skulls" (1992). Es una de las mejores épocas del grupo, considerada la “época dorada”, también debido al éxito que llevan arrastrando del “Under Jolly Roger”.
A partir de inicios de los 90, los cambios de alineación se hacen más frecuentes aunque no dejan que desear. Rolf se rodea de buenos músicos, destacando el batería Jörg Michael, Jens Becker y Thomas Smuszynski al bajo y Thilo Hermann a la guitarra. Esto convierte cada vez más a Running Wild en un proyecto en solitario de Rolf Kasparek.

Después del "Black Hand Inn" (1994), se inicia una trilogía formada por "Masquerade" (1995), "The Rivalry"(1998) y "Victory" (2000), en la que predomina la temática de la batalla entre el bien y el mal.
En 2002 sale "The Brotherhood", que a pesar de sus criticas negativas se convierte un éxito de ventas. Le sigue "Rogues En Vogue" (2005). De estos álbumes, destaca al igual que de los anteriores, el sonido clásico de Running Wild, y su temática más variada. De esta época destaca la incorporación de Peter Pichl al bajo, Bernd Aufermann a las guitarras y más recientemente Matthias Liebetruth a la batería.

En abril de 2009, tras varios años de inactividad, Rock'n'Rolf anunció el fin de Running Wild tras 30 años de historia con un concierto final como cabeza de cartel en el Wacken Open Air de ese año. Esto creó una mala reacción entre los fans, ya que las entradas ya estaban agotadas, y sus fans no pudieron ver su última actuación. Supuso una gran perdida para el panorama del Heavy metal europeo.

En octubre de 2011, Rolf Kasparek anunció el regreso de Running Wild con un nuevo disco que salió bajo el título de “Shadowmaker”.

“Pile Of Skulls” es uno de los discos que consolida el estilo de Heavy metal característico de Running Wild, cuya dirección musical y temática los lleva a considerar a su estilo como “Heavy metal de piratas”, ya por las melodías de sus guitarras, que son como cánticos de marineros en busca de aventuras, como por la voz de Kasparek y por las letras de sus canciones, pero vamos al “track by track”, y desentrañar este disco.

“Chamber Of Lies” es una gran intro que comienza con esos efectos de coros oscuros, seguido de guitarras limpias y distorsiones a modo de música de bucaneros, ya para empezar a tomar el barco e ir en busca de aventuras para llegar a la isla del tesoro (bien podría ser una perfecta banda sonora para Piratas del Caribe). Luego de escuchar esta intro, viene una canción poderosa y aventurera, con guitarras galopantes y la voz de Rolf, que con la potente batería, y los solos, da el poder al disco, como lo es “Whirlwind”. “Sinister Eyes” nos trae el ritmo característico de la banda, tan potente que los grumetes que están limpiando la cubierta, hacen la guitarra de aire y mueven sus sucias melenas al ritmo del mejor Heavy Metal que tiene cargado esta tripulación. En la siguiente canción, nos lanzamos de aventuras, solo al escuchar la melodía con que arranca “Black Wings Of Death”, para darle paso a una serie de sonidos bastante épicos, ¡para mandar al otro mundo a ese barco enemigo que nos quiere hundir a toda costa! Seguimos con “Fistful Of Dinamyte”, y con esta, tiramos con todo esa carga de dinamita sonora, para demostrar que estos bucaneros no son piratas de agua dulce. “Roaring Thunder“ nos lleva un poco a los gloriosos y clásicos ritmos del Heavy bien ochentero, de los primeros tiempos de Running Wild, ¡¡así que piensen en esa batería poderosa y esos riffs sencillos pero bien power!! Volvemos a la batería contundente, al riffeo rápido y al sonido potente, al moshpit y al movimiento de melenas, en la canción que titula el disco, “Pile Of Skulls”, tema donde brilla la técnica de las guitarras de la banda, junto con los coreos y la voz de Kasparek. ”Lead Or Gold” es lo que se corea en el principio de esta siguiente canción, donde vuelven a aparecer estos riffs galopantes y los ritmos aventureros para sentirse a gusto navegando en ese mar lleno de monstruos marinos… Y la aventura sigue en “White Buffalo”, un tema que descarga toda su energía heavy, tanto en sus riffs como en sus ritmos… ¡Oh! ¡El Capitán Jennings volvió para vengarse! Y su tripulación de bucaneros nos ataca sin piedad con una canción tan poderosa como su risa maquiavélica de pirata, en “Jennings Revenge”. Y al final del disco, tenemos un viaje épico llamado “Treasure Island”, donde se cuenta la peligrosa cruzada de un barco pirata hacia la isla del tesoro, mediante una banda sonora llena de poder, épica y fuerza a través de sus once minutos, en donde escuchamos una intro narrada por Kasparek (la imitación del grito del capitán es estupenda), y también tiene un cambio de ritmo que aumenta la fuerza del tema, siguiendo así hasta el final.

Este es un disco que merece la pena tener y escuchar, así como el resto de los discos de Running Wild, que como mencioné en un principio, están de vuelta, más poderosos que nunca, con su nueva creación, “Shadowmaker”. Pero por ahora, disfrutemos de esta bitácora, cerremos los ojos, y viajemos por los siete mares a través de su “Pile Of Skulls”.

Banda: Running Wild
Disco: Pile Of Skulls
Año: 1992
Sello: Noise Records
Estilo: Heavy Metal
País: Alemania

Formación:
Rolf Kasparek - Voz/Guitarra
Stefan Schwarmann - Batería/Coros
Thomas "Bodo" Smuszynski - Bajo/Coros
Axel Morgan - Guitarra/Coros

Tracklist:
1.Chamber Of Lies
2.Whirlwind
3.Sinister Eyes
4.Black Wings Of Death
5.Fistful Of Dinamyte
6.Roaring Thunder
7.Pile Of Skulls
8.Lead Or Gold
9.White Buffalo
10.Jennings Revenge
11.Treasure Island

Reseña y comentarios: Diego Pereira
Texto adicionado extraído de www.wikipedia.com

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sábado, 19 de enero de 2013

Manowar - Battle Hymns


Bueno, teníamos guardada nuestra maquina del tiempo del metal, y ahora hemos vuelto a desenfundarla y marcar como año y lugar, a los Estados Unidos de 1982. Año en que el gran estilo conocido como el Heavy Metal, tendría sus grandes legiones de seguidores a nivel mundial, y una de esas bandas que cosecha la gran consolidación de este estilo es Manowar. Le toca el turno a su gran debut, “Battle Hymns”.




Manowar es un grupo formado en Auburn, Nueva York en 1980, por Joey Di Maio (uno de los más grandes bajistas del metal de todos los tiempos), Ross “The Boss” Friedman (gran guitarrista del metal), Donnie Hamzik en la batería, y por el cantante Louis Marullo, por quien todos lo conocemos por Eric Adams (pseudónimo puesto en nombre de sus dos hijos, Eric y Adam respectivamente). Di Maio trabajaba como técnico de bajo de Black Sabbath, para la gira “Heaven and Hell”, cuando en una ocasión conoció a Ross, que tocaba en The Dictators, y conversó con el para formar una banda de Heavy Metal,  y la aceptó con gusto. Luego reclutaron a viejos conocidos de la escuela, a Hamzik y a Adams respectivamente. Junto con Judas Priest, Black Sabbath, Iron Maiden y aledaños, fueron precursores del Heavy Metal de los 80, y pioneros del gran estilo “Power Metal”, del que salieron fieles herederos como Hammerfall, Dragonforce, Trivium y otros, que llevan en su sangre la gran esencia guerrera de estos cuatro caballeros, así como generadores de la imagen y temática de actitudes recias, vida al límite, y también de las batallas épicas, que acentuada con su música, se los conoce como los “guerreros del metal”. El nombre fue puesto por una pieza militar de la marina británica, más bien, una nave armada con un cañón, usada entre los siglos XVI y XIX, conocida como la “Man o’ War”. La banda tiene hasta records Guiness (lograr el sonido más potente en una gira, con 129.5 decibelios, en diez toneladas de amplificadores y altavoces, en sus giras “Spectacle Of Might” y “Fighting The World”; este record es de “la banda más ruidosa”; y dando el recital más largo del heavy metal (en Kavarna, Bulgaria, que duró más de 5 horas).

Esta pieza de historia, cuya portada ilustra a un hombre-águila hecho de piedra, arranca con el sonido de una legión de motoqueros, arrancando sus Harley Davidson e invadiendo las calles en busca de aventuras y nuevas emociones, dando paso a un épico riff y su ritmo rockero en “Death Tone” (me sigue enganchando la primer estrofa “riding on two wheels, chains up to my heels, sittin’ in leather, riding on steeeeeeeeeeeeeeeeel!”), una joya. Le sigue otro ataque de poder heavy, que es “Metal Daze”, para engancharte con una cerveza y cantar “Heavy Metal, Heavy Metal Daze!”, donde también hace juego la guitarra de Ross The Boss, y la potente batería de Hamzik. El peludeo se da cuando se escucha “Fast Taker”, gran canción donde hace buena presencia el bajo “piccolo” de Joey Di Maio, que resalta el poder en este viaje. Tenemos también un ritmo de rock pesado de taberna, en “Shell Shock”, canción que habla de la gente que es mandada a Vietnam, en los tiempos de la guerra. Adams se luce con su juego de voces en este tema. Aumentamos la potencia cuando escuchamos “Manowar”, un himno cantado a viva voz, marcado por sus guitarras galopantes y ritmo arrasador, donde se cuenta como surgió esta banda (We met  on English ground…”). “Dark Avenger” trae el sonido de power metal épico, donde los ritmos lentos y pesados cobran vida, y, tras una narración hecha por el famoso actor y director de cine Orson Welles (1915-1985) que habla del oscuro vengador que saca su espada y sale al ataque, surge el cambio de ritmo detonante y para meterse al moshpit seguro… “William’s Tale” es un instrumental, que es más bien una versión del clásico del famoso compositor Gioachino Rossini, “Guillermo Tell”, perfectamente ejecutada por Joey Di Maio en el bajo. Para terminar, tenemos uno de los temas que creo que ha emocionado a más de un guerrero de la legión mundial de metaleros, e incluso se le habrá escapado una lágrima, al escuchar lo que no es una canción, sino un “himno de batalla”, o sea, “Battle Hymn”, donde también se escuchan teclados que acentúan este tema, donde hace también juego la melodía con el poder de esta legión de guerreros, sobre todo en la parte donde la parte heavy queda pausada, y se lanza una parte acústica y la suave voz de Adams, que seguro le tocará el corazón a más de uno. Todo esto en 8 temas para salir en busca de aventuras…

No piensen que esta joya quedó enterrada en el pasado, ya que se consolidó con sus siguientes álbumes, como “Hail To England”, “The Sign Of The Hammer”, “Fighting The World”, “Louder Than Hell”, y recientemente “The Lord Of Steel”. Es más, Manowar ha traído esta joya al futuro, regrabándola en 2010, bajo el título de “Battle Hymns MMXI”, con un nuevo sonido, pero con la misma intensidad que su hermana mayor, aunque la portada de este nuevo disco es negra, con el hombre-águila en oro, resaltando la inmortalidad de este gran disco.

Una de las primeras joyas a analizar en la sección “Viejos discos, nuevos sonidos, la misma intensidad”, y esto es solo el comienzo…

Banda: Manowar
Disco: Battle Hymns
Año: 1982
Sello: Liberty/Capitol Records
Género: Heavy/Power Metal

Formación:
Eric Adams – Voz
Joey Di Maio – Bajo de 4 y 8 cuerdas/Bajo Piccolo de 4 y 8 cuerdas/Teclados
Ross The Boss – Guitarra
Donnie Hamzik – Batería/Percusión

Tracklist:
1.Death Tone
2.Metal Daze
3.Fast Taker
4.Shell Shock
5.Manowar
6.Dark Avenger*
7.William’s Tale
8.Battle Hymn

Temas extra del disco “Battle Hymns MMXI” (2011, Magic Circle):
9.Fast Taker (Live 1982)
10.Death Tone (Live 1982)

*En “Battle Hymns MMXI”, la narración en este tema, la hace el actor Christopher Lee.

Texto y comentarios: Diego G. Pereira